Recuerda que Dios te ama muchísimo y quiere ser tu Padre Celestial y tenerte viviendo con Él en el cielo algún día. Pero tu pecado te separa de Él. Por eso Él envió a su Hijo, el Señor Jesús a morir en la cruz por ti.
La Biblia dice: "Mas a todos los que le recibieron (al Señor Jesús), a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios." (Juan 1:12) Eso significa que si tú crees con todo el corazón que Jesús murió por ti y resucitó y le recibes, invitándole a venir y quitar tus pecados, Él te hará parte de la familia eterna de Dios. Dios será tu Padre Celestial ahora, y algún dia tú compartirás el hogar de Dios con Él en el cielo.
¿Alguna vez has creído y recibido al Señor Jesús para que puedas ser hijo de Dios?
No estoy hablando de que si asistes a la iglesia o has sido bautizado o si tus padres son cristianos. Esas son buenas cosas. Pero no pueden quitar aun un pecado. Él quiere que tú le creas y le recibas.
Si tú crees que Jesús, el Hijo de Dios murió por tus pecados en la cruz y resucitó, ¿dirías a Dios ahora
1. que reconoces que has pecado.
2. que crees que Jesús el Hijo de Dios, murió por ti y resucitó.
3. que le invitas para que sea tu Salvador y tu Padre Celestial?
Puedes orar así:
Querido Dios,
Sé que he pecado y he hecho cosas malas contra Ti. Creo que Jesús es el Hijo de Dios y que Él tomó el castigo por todos mis pecados muriendo en la cruz. Creo que Él volvió a la vida. Te recibo ahora como mi único Salvador del pecado. Gracias por hacerme tu hijo ahora como prometiste.
En el nombre de Jesús, Amén.
Si oraste estas palabras y es verdad, Dios te ha hecho parte de su familia eterna. No es porque yo lo digo, sino porque Él lo prometió (recuerda Juan 1:12) y Dios cumple sus promesas.
Permíteme mostrarte otra promesa bonita para ti en la Palabra Dios. Hebreos 13:5 dice, (Dios está hablando): "No te desampararé ni te dejaré." ¿Te dejará Jesús? Él promete: "No." ¿Y si tú vuelves a pecar? No, Dios dice, "No te dejaré." Y Hebreos 13:6 dice: "El Señor es mi ayudador." Él te dará el poder para hacer lo que es correcto.
Cuando llegues a ser un hijo de Dios, Él quiere que crezcas al conocerle mejor cada día. La última página, la página verde, te dice cómo.