loading

La Familia que Lucha

Una interrogante que nos da este título es: ¿Contra qué lucha? O ¿quién es el enemigo de la familia? Podemos dar muchas respuestas, desde las más espirituales hasta las más mundanas; en este momento quiero hacer referencia al concepto de la funcionalidad de la familia como nuestro objetivo. Sin duda hemos escuchado el término disfuncional.

Para poder describir este concepto tenemos que partir de definir lo que puede significar una familia funcional; parafraseando la palabra podemos decir que es una familia que funciona. En este sentido podemos pensar en una familia que sabe adaptarse, que resuelve problemas, que apoya en lo colectivo el desarrollo individual y otros elementos al respecto. Entonces tenemos que alejar conceptos difundidos socialmente que hacen referencia a una familia disfuncional como aquellas familias donde solo se encuentra con uno de los padres o cosas similares.

Una definición del diccionario es la siguiente: “Una familia disfuncional es aquella donde los conflictos, la mala conducta o abuso, se producen de manera continua y regular por parte de los miembros.” La familia disfuncional no tiene ningún límite social, financiero ni intelectual; podemos encontrarlas prácticamente en cualquier entorno. Una forma de identificar este tipo de familias es cuando en aquellos hogares encontramos frecuentemente: falta de empatía, incomprensión, insensibilidad, negación, falta de respeto, bandos, desigualdad, celos, padres separados o en conflicto, falta de interacción, comportamiento sexual anormal, miedo a interactuar, prejuicios, etiquetación de los miembros de las familias, etc.